miércoles, 4 de julio de 2007

Abrí mi cuaderno para repasar la materia y mientras lo hojeaba, me encontré con un regalo asqueroso que me dejó él: un mechón de bellos púbicos.
Todavía no sé si quería que me acordara de esas calurosas tardes en la playa, en las que teníamos relaciones sexuales a la orilla del mar, sin importarle los testigos que ahí se encontraban (sin importarle tampoco si yo tenía ganas) o si realmente pretendía impedirme estudiar debido al vómito que acabo de dejar en esas páginas.

domingo, 1 de abril de 2007

¿QUÉ TE PUEDO REGALAR? (Para mi Joaquín)


Mi cuerpo, para que escribas en él:
mis ojos, para que en ellos puedas ver;
mis manos, para que puedas pintar;
mis pies, para caminar.

CREDO

No creo en Dios, padre Todopoderoso,
ni en promesas que ocultan mentiras,
ni en silencios absolutos.

Creo en lo invisible
del mar en el firmamento.
Allá arriba, donde los peces son aéreos,
las nuves, espuma marina
y el viento, olas
que enrredan nuestro cabello.

No creo, lamentablemente, en la autosuficiencia,
ni en los temores sin pasado,
ni en la vida que no es vivida.

Creo en cambio,
que somos una biblioteca humana
en espera de ser leídos
y verdugos de cualquiera
que intente hacerlo.

No creo en las despedidas,
sino que en lo palpable del recuerdo.

No creo en los enigmas,
sino que en la insatisfacción de las respuestas.

No creo en el destino,
sino que en la construcción de un camino.

No creo en la verdad de las palabras,
yo, ciegamente, le creo a los ojos.

Creo en mi pésima memoria,
creo en los sentimientos autoinducidos,
creo en la manipulación de las manos
y la cremación de la crema.
Creo que me dio hambre
y que iré a buscar algo para comer.

sábado, 17 de marzo de 2007

C-I-E-L-O

La primera vez que mis labios tocaron los tuyos,
fue en un frío y lluvioso día de invierno
que el sol templó cuando nos sonrió
y una estrella se sacrificó desprendiéndose del cielo
para ser la portadora del deseo que pidiéramos.

Cuando nuestros cuerpos se encontraron,
la Luna, curiosa dama nocturna, empujó al sol
para acurrucarnos con una luz más tenue
y las olas del mar reventaron al ritmo de nuestros movimientos
al momento de amar.

No había belleza comparable
¡hasta la naturaleza sintió celos de nosotros!
tantos, que luego de la primera ruptura
no tuvo ganas de mostrar su esplendor,
pues ya se había coronado
reina de la perfección terrenal.

Así que los árboles dieron frutos podridos,
la tierra no quiso ser fértil
y de escupos color nostalgia se hizo la lluvia.

Y para el segundo quiebre,
todos los sueños se volvieron pesadillas,
la vejez huyó de nosotros, rehusándose a aparecer
hasta que estuviéramos juntos.
Antes de ser fecundada aborté tres veces:
a Pasado, Presente y por último a Futuro.

Nuestra estrella Portadora se sintió ofendida
y sin perder las esperanzas, trepó hasta el cielo
diciéndo que lo haría las veces que fuese necesario
hasta cumplir el deseo que algún día juntos pedimos:
estar juntos de aquí hasta siempre.

viernes, 2 de marzo de 2007

EL SILENCIO OTORGA

- Tú ya no me amas -decía Albina mientras intentaba controlar el castañeo de su cuerpo.
- ... (Silencio).
- ¡Admítelo! ¡Dilo ya, quiero oírlo de tu boca!
- ... (Silencio) -Aldo no responde pues está concentrado en que al tragar, la saliva no se le quede estancada en la garganta.
- Pero respóndeme... estoy en lo cierto ¿verdad?
- ... (Silencio).
- Está bien, no necesitas decir nada. Supongo que es cierto eso de que "el silencio otorga".
Derrotada, se vuelve hacia la puerta de salida, cabizbaja, con los ojos llenos de lágrimas emprende su retiro; sintiéndo un punzante dolor corporal, casi como si hubiese salido de una batalla.
- Clap, clap! -aplaude Aldo.
Albina se detiene y siente cómo se le dibuja en el rostro una tímida sonrisa cómplice.

jueves, 1 de marzo de 2007

INTENTO DE VERSOS

No te jactes de haberme cautivado
por coger mi mano sin aviso previo,
por ser caballo en el ajedréz humano
o por lanzarme besos tímidos
en medio de la muchedumbre.

No te jactes de haberme cautivado
por ser un escritor compulsivo,
por sonreírme con un dejo de ternura
o porque tus ojos sean banderas blancas
en tiempos de guerra.

Pues no me enamoraste por tus méritos,
sino que sólo por ser tú;
porque apareciste en mi camino, porque vives.

Que a fin de cuentas
fue cogiéndo mi mano,
siendo un caballo humano
y lanzando besos al aire.

Que a fin de cuentas
fue dedicándome tus versos,
sonriéndome con ternura
y dándole paz a mis pensamientos.

SIN TÍTULO (soy pésima para ponerlos)

Luego de nueve meses de larga espera, dio a luz a su primogénito: el bebé más hermoso jamás visto; sus tapas eran suaves y de color marrón , igual que su padre (marrón como los troncos de los árboles y la tierra) y en su interior, un sin fin de hojas tan blancas, que al verlas encandilaban (blanco como el vacío, como la nieve o como . . .).
Todos los días su madre colmada de orgullo, escribía sobre la alba piel de su hijo, marcándole todo el cuerpo con la firma de los Sotomayor.


INSTRUCCIONES PARA OBSERVAR (copiando a Cortázar)


Si crees que observar es tan fácil que todas las personas pueden hacerlo, he ahí tu grave error: no todas pueden, ahora te explico por qué, calma... Para observar se requiere tener globos oculares (los comúnmente denomidados “ojos” esos que se encuentran bajo las cejas y sobre las mejillas, sujetados por los párpados a fin de que se mantengan en su lugar) y ustedes comprenderán que desafortunadamente no toda la población los tiene; Pero eso no es todo, además de tenerlos hay que tenerlos buenos, de esos ojos que ven no importa el color (no soy razista) ni el tamaño, sólo nos debe importar que cumpla su función, de lo contrario, le será imposible inclúso leer esta instrucción (o mejor dicho: será imposible inclúso LEER).

Bien, ya tenemos los ojos y la visión. Los ojos, son a mi parecer, el sentido más importante del ser humano. Cumplen el rol de ver, de mostrarnos el mundo que nos rodea...

Pero enfoquémonos en lo nuestro. Lo primero que hay que tener claro, es que mirar no es lo mismo que observar, y lo que quiero enseñarles a hacer es lo segundo. Mirar es sólo pasear la vista de un lado a otro, reconociéndo lo que está cerca nuestro, pero sólo a grandes rasgos, en cambio, observar no es sólo reconocer qué es lo que nos rodea, sino que conocerlo a cabalidad; es persivir los detalles de su composición, por muy poco notorios que éstos sean.

Mira atentamente lo que tengas enfrente, su forma, textura y color. Pon toda tu atención en ESE objeto que estudias y ahora dime ¿creías conocer el objeto que tienes en casa hace ya nueve años? ¿te das cuenta que las cosas simples no existen y que todo tiene un lado oculto y místico capaz de atraer nuestra atención?

Ya aprendido el ejercicio, dedícate a observar y deborar con la vista cuanta cosa tengas ante tus ojos, pues ayuda al desarrollo de la creatividad, la concentración y meditación. Y de pronto ¿quién sabe si te topas con un espejo?

domingo, 25 de febrero de 2007

PARA QUE ME RECUERDES

Tomé de mi piel las estrellas,
de mi pecho la luna
y las colgué de un salto en el cielo
para que me vieras resplandeciente
cada vez que cayera la noche.

Del azabache de mis cabellos construí tu sombra
y de color esperanza tejí un venidero mundo maravilloso
(que aloja en tu muñeca derecha)
en un intento de borrar heridas pasadas.

Me volví lluvia para ser tu amante
y desbordarte de mí en invierno
y brisa fresca en verano
para aliviar tu agobio
cubriéndote de sutiles caricias marinas.

Con la llama de mis dedos escribí
hasta en los lugares más recónditos de tu cuerpo
la más limitada frase de amor;
y me inserté en cada uno de los libros
para que te embobes cuando me leas hablar.

Para que me desees besé tu oreja,
para que me ames, tus labios
y para que me recuerdes...
Para que me recuerdes, te amé.